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¿Qué es el vino sin alcohol y cómo se hace?
El vino sin alcohol es el vino del que se ha eliminado el alcohol. Pero Se somete al mismo proceso de producción que el vino normal pero con un paso adicional para extraer el alcohol.
Los alimentos y bebidas saludables son una tendencia creciente. Cada vez son más los productores que se unen a esta tendencia añadiendo variaciones dietéticas de sus productos a sus carteras.
E incluso como amante del vino, puedes encontrar una versión de tu bebida favorita que supuestamente es más saludable que el vino normal: el vino sin alcohol o desalcoholizado.
En este artículo, veremos cómo se elabora el vino sin Alcohol, cómo sabe y cuáles son sus ventajas sobre el vino normal.
¿El vino sin alcohol es lo mismo que el zumo de uva?
No, el vino no alcohólico y el zumo de uva no son las mismas bebidas. El zumo de uva es simplemente el extracto de uvas que se trituran y prensan.
Pero el vino sin alcohol se somete a un complejo proceso de producción que es muy similar a la vinificación regular. Incluye la fermentación y, en muchos casos, el envejecimiento en barricas. Por último, se le añade un último paso para extraerle el alcohol.
Durante este proceso de producción, la mayor parte del azúcar que hace que las uvas y el zumo de uva sean dulces se transforman en alcohol. Por lo tanto, el vino sin alcohol es menos dulce que el zumo de uva. También desarrolla muchos más aromas y sabores que el zumo de uva no tiene.
¿Cuándo se inventó el vino no alcohólico?
El vino dura desde hace aproximadamente 8000 años, pero el vino sin alcohol es una bebida relativamente joven. Su invención se atribuye a la familia Jung, propietaria de un viñedo en la región del Rin en Alemania.
Johann Jung, nacido en 1798, no solo era viticultor, sino también tonelero. Enseñó todo sobre sus artesanías a su hijo Carl, que se hizo cargo del negocio familiar y fundó la empresa Carl Jung en 1868. Mientras Carl se centraba en la elaboración del vino, su esposa María viajó por toda Alemania para vender sus vinos a clientes ricos.
A lo largo de los años, se dio cuenta de que cada vez más clientes dejaban de pedir porque sus médicos les aconsejaban que consumieran menos alcohol.
Cuando habló de estas experiencias en casa, otro miembro de la familia Jung se involucró: Carl y el hijo común de María, Carl Junior. Empezó a experimentar con el equipo de su padre para encontrar una manera de hacer vino sin alcohol. Y tuvo éxito: en 1908, Carl Jung jr. Presentó una patente para su proceso de desalcoholización.
Desde entonces, el proceso se ha mejorado continuamente y, hoy en día, es una de las técnicas más avanzadas del mundo para hacer vino Desalcoholizado.
¿De qué está hecho el vino sin alcohol?
Al igual que el vino normal, el vino sin alcohol está hecho de uvas. Los viticultores utilizan todo tipo de variedades rojas y blancas para hacer vinos Desalcoholizado.
Cómo se elabora
El proceso de elaboración de vino Desalcoholizado no es muy diferente de la elaboración regular del vino. Consiste en los mismos pasos:
- Los viticultores cultivan las uvas y las cosechan tan pronto como alcanzan el nivel óptimo de azúcar y acidez.
- Después de la cosecha, trituran las uvas. Dependiendo del estilo de vino deseado, eliminan los sólidos de la uva (pieles, tallos, semillas) o los dejan en el mosto.
- A continuación, fermentan el zumo de uva. Durante la fermentación, el azúcar de uva se convierte en alcohol. Si el objetivo es hacer un vino dulce, los viticultores detienen la fermentación temprano, por lo que queda mucho azúcar residual. En caso de que quieran producir un vino seco, esperan a que todo el azúcar se haya transformado en alcohol.
- Muchos vinos sufren un período de envejecimiento después de eso. Pasan tiempo en barricas de roble, donde maduran lentamente. Eso significa que desarrollan nuevos aromas, sus taninos se suavizan y se vuelven más equilibrados en el sabor.
En este punto, los viticultores embotellan vinos regulares.
Pero para los vinos no alcohólicos, tienen que realizar un paso adicional antes del embotellado: extraer el alcohol. Para eliminarlo, los enólogos tienen tres opciones diferentes.
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Método 1: Destilación
La primera forma de producir vino sin alcohol es la destilación. Los viticultores calientan el vino a la temperatura en la que el alcohol se evapora, para que simplemente puedan extraerlo. Desafortunadamente, calentar el vino hace que se oxide, y la oxidación puede provocar cambios de sabor muy desagradables.
Para evitar este problema, los viticultores realizan la destilación al vacío. Dentro de un vacío, la temperatura de ebullición del alcohol disminuye, por lo que los enólogos pueden destilar sus vinos a temperaturas mucho más bajas sin el riesgo de arruinarlos.
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Método 2: Ósmosis inversa
El segundo método para desalcolizar el vino es un proceso llamado ósmosis inversa. Durante este proceso, los viticultores utilizan alta presión en lugar de calor para lograr sus objetivos.
Fuerzan el vino contra una membrana, que es una barrera física muy delgada. Esta barrera funciona como un filtro que separa el agua y el alcohol de los componentes aromáticos del vino.
A continuación, los viticultores destilan la mezcla de agua y alcohol para eliminar el alcohol. Y, por último, reúnen el agua restante con los componentes aromáticos. Como el volumen de agua es menor que la mezcla alcohol-agua, normalmente tienen que añadir más agua para llegar a las proporciones adecuadas.
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Método 3: Conos giratorios
La tercera forma de hacer vino sin alcohol es la tecnología de conos giratorios. Los viticultores ponen su vino en una columna de conos que giran a muy alta velocidad. Estos movimientos crean fuerzas centrífugas que transforman el vino en una película muy delgada.
A continuación, se bombea gas nitrógeno a la columna. Este gas extrae los componentes del aroma del vino, que se almacenan en un tanque separado.
La mezcla restante de agua y alcohol vuelve a pasar por la columna de conos giratorios. Pero esta vez, los viticultores aumentan la temperatura dentro de la columna.
Este segundo recorrido separa el agua del alcohol para que los viticultores puedan extraer el alcohol. Por último, remezclan el agua con los componentes del aroma para crear el vino Desalcoholizado.
¿A qué sabe el vino Desalcoholizado?
Una de las preguntas más interesantes sobre el vino Desalcoholizado es sobre el sabor. Y el vino sin alcohol en realidad proporciona sensaciones diferentes a las del vino normal con alcohol.
Sin embargo, el etanol (que es el tipo específico de alcohol utilizado en las bebidas) no tiene un sabor distinto. Al igual que el agua, tiene un sabor bastante neutro.
Sin embargo, el alcohol cambia la sensación en boca de un vino, también conocido como el cuerpo del vino. Cuanto más alcohol tenga el vino, más pesado y viscoso se siente. Lógicamente, el vino sin alcohol es delgado y tiene una ligera sensación en la boca.
Además, el alcohol transporta sabores. Eso significa que el vino sin alcohol tiende a tener un sabor menos intenso que un vino similar con alcohol, incluso cuando están hechos de la misma variedad de uva y presentan los mismos aromas.
¿Cuánto dura el vino Deshalcolizado?
El alcohol es un conservante y ayuda a mantener el vino fresco. Un vino sin alcohol carece de este conservante, por lo que no dura tanto como el vino normal. Sin embargo, una botella sellada almacenada en perfectas condiciones puede durar unos años.
Una vez abierto, deberías terminar rápidamente una botella de vino sin alcohol. Si no quieres beberlo completamente el mismo día, vuelve a sellarlo, ponlo en la nevera y termínalo en un plazo de dos o tres días.
Beneficios de los vinos Desalcoholizados
Hay varias razones para preferir el vino sin alcohol a los normales. Estas son las principales razones:
- Obviamente, este vino no te emborracha. Al menos no tan rápido como el vino normal. Ten en cuenta que los vinos deshalcolizados no están totalmente libres de alcohol. A la mayoría le queda un poco porque el proceso de extracción no puede sacarlo todo. Eso también significa que el vino Desalcoholizado no es una gran solución para las personas que se recuperan de la adicción al alcohol.
- Este vino tiene menos calorías que el vino normal. Más específicamente, solo tiene entre el 30 y el 50 % de las calorías que tiene el vino con alcohol de la misma variedad.
Por lo tanto, si estás a dieta, este vino es la mejor opción para ti. Sin embargo, este vino suele tener más azúcar residual que el vino normal. Por lo tanto, para una persona con diabetes, puede que no sea la bebida más segura.
- El alcohol es un problema para las personas que sufren de reflujo o presión arterial alta. Lógicamente, estas personas tienden a tolerar el vino Desalcoholizado mejor que el vino normal.
Conclusiones
¿Por qué elegir vinos Desalcoholizadol?
La cuestión es que su consumo está aumentando entroncando con la tendencia creciente de cuidado del cuerpo y la alimentación natural. Además, los consumidores buscan este tipo de bebida sin graduación (o muy baja) por distintas razones:
- Por salud o prescripción médica en el caso de pacientes a los que se les ha aconsejado reducir su ingesta de alcohol mientras estén bajo tratamientos médicos o farmacológicos, por ejemplo.
- Para poder conduciro manejar maquinaria.
- Por distintas situaciones pasajeras en la mujer: embarazo o lactancia por ejemplo.
- Para no embriagarse en los almuerzos de trabajo o con clientes en los que se quiere mantener el uso social del vinocomo acompañante de las comidas.
- Por motivos religiosos. Algunos vinos desalcoholizados españoles han conseguido el certificado Halalque permite su consumo a los musulmanes, por ejemplo.
El mercado de vinos Desalcoholizado es mucho más maduro en países como Estados Unidos o Francia en cuanto a la aceptación por parte del consumidor.
En España, la consultora IWSR establecía que existe un margen de crecimiento muy alto, cifrado en un 36,8% hasta 2022. IWRS, especializada en análisis de mercados y tendencias de consumo de bebidas alcohólicas, se basa en una encuesta realizada en bares y restaurantes que arrojó la cifra que el 50% de ellos dispensaban bebidas con bajo o sin ningun alcohol, muchas de ellas disponiendo de cócteles elaborados con ellas.
El mayor reto de Felix Gonzalez
Félix González es uno de los enólogos más reputados de España, responsable de todos los vinos del Grupo Matarromera, una importante empresa vitivinícola española que facturó en 2017 casi 22 millones de euros.
En sus manos están algunos de los mejores viñedos de la Ribera del Duero (y de otras cuatro denominaciones), pero su mayor reto profesional no ha sido colocar sus caldos en lo alto de la lista Parker –algo a lo que ya está acostumbrado–, sino producir un vino sin alcohol que sea siquiera bebible, hoy reunido bajo la marca Win
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